El solo hecho de decirle a tu hijo que no hable con extraños, no es suficiente. Es necesario que tomes en cuenta otros factores que puedan proteger y mantener a salvo a tus hijos de los desalmados secuestradores.
Cada día crece más el número de víctimas por secuestro a nivel mundial. Anteriormente los secuestros solo se veían en las altas esferas, ahora: el tráfico de órganos, depravadores sexuales y otras barbaridades han ido en constante aumento. ¡No permitas que tu hijo sea parte de las estadísticas!
Asegúrate de que tu hijo se aprenda lo siguiente:
Enséñale a tu hijo a marcar los números de teléfono tanto el de los celulares como los teléfonos tradicionales que se tienen en casa. Asegúrate de que aprenda a hacer llamadas de larga distancia con el operador marcando el cero (0). Además, es bueno que tenga un listado con los números donde pueda el niño pueda llamar en casos de emergencia. Los niños son muy curiosos y aprenden muy rápido; es probable que aprenda de memoria todos los números de emergencia como el de la policía, el de algún vecino, el de la abuela u otro familiar.
Enséñale a tu hijo qué hacer en caso de que se separen al ir de compras o a otros lugares públicos, por ejemplo: si se separan y hay muchas personas alrededor, pueden acordar previamente el encontrarse en un punto cualquiera elegido por ambos (un gran árbol, un kiosco o en información, si están en el supermercado). Debes hacer énfasis en que debe esperarlo justo en ese punto y no moverse de ahí.
¿Dónde están tus hijos? Es imprescindible que sepas a cada momento en qué lugar están jugando tus hijos. No permitas que tu hijo salga de la casa sin tu permiso. Enséñele lo importante que es, el antes de ir a la calle, al patio, a la casa de un amigo, a la cancha de béisbol, que primero debe pedir la autorización de un adulto de la casa en caso de que no estés presente.
No dejes nunca a tus hijos solos, ni mucho menos en el automóvil, incluso si dejas el carro cerrado y encendido.
Si vas a algún lugar en el que habrá mucha gente (un concierto, un una playa, un mercado al aire libre, una feria o a un centro comercial), ponle un brazalete de identificación a tu pequeño.
No envíes solo a tu hijo a la escuela. Ubica los niños que hacen la misma ruta y emplea el sistema de compañeros. Habla también con las madres de estos niños para que sepan él porque es buena idea que caminen juntos a la escuela.
Enséñale a tus hijos a ser desconfiados de adultos extraños que les pregunte por direcciones o ayuda de cualquier tipo, por ejemplo: los secuestradores usan la táctica de que les ayude a buscar un perrito o alguna otra cosa. También algunos les dicen que tú lo enviaste para buscarlo.
Mantén una foto reciente de tu hijo en tu cartera en caso de que tenga que usarla para una identificación al instante.
Si no eres tú la persona encargada de ir a buscar a tu hijo a la escuela o a cualquier otra parte, debes dejar establecido quién lo va a pasar a recoger a la hora de la salida. Dile cuál es la persona autorizada cuando no puedas ir a recogerlo, en caso de que se te presente una emergencia y tengas a la mano la disponibilidad de otra persona de confianza: notifícalo a la dirección de la escuela para que estén pendientes y le digan al niño que SI puede irse con esa persona. Muchas veces no lo hacemos por cualquier motivo, hasta por no "molestar" a la gente y le restamos valor a este importante consejo.
Coloque tarjetas de identificación en los bolsos o morrales de tus hijos, con instrucciones de cómo contactar a los padres. Algunos niños han perdido la costumbre de escribir sus datos en los libros y cuadernos. Esto es muy importante en casos de que no tenga en sus bolos la tarjeta de identificación.
Enseñe a su hijo a GRITAR para pedir ayuda y para hacer ruido tanto como le sea posible si se siente amenazado o si alguien intenta secuestrarlos.
Si tu hijo insiste en que no quiere estar con cierta persona: NO LE RESTES IMPORTANCIA y averigua sus razones. Presta atención al comportamiento de tu hijo y la actitud que tiene hacia esa persona.
Enséñale a tu niño o niña que JAMÁS debe abrir la puerta a un desconocido cuando están solos en casa (aunque no deberías dejarlos solos nunca), incluso si la persona en la puerta es un agente de la policía. En este caso, enséñele a su hijo a verificar esto con el departamento de la policía antes de abrir la puerta.
NO permitas que tu hijo o hija de información personal como el nombre, la dirección o decirles con quién están en la casa a través del teléfono o en internet.
No le pongas a tu hijo ropa o accesorios con su nombre, esto le facilitará al secuestrador acercársele con más confianza al niño.
Enséñale a tu hijo a NO esconderse si alguien lo está siguiendo. Dile que busque ayuda de inmediato en la casa más cercana o que entre a una tienda y pida ayuda.
Si un adulto le está prestando demasiada atención a tu hijo, averigua cuáles son sus verdaderas intenciones. No te descuides.
Estas son solo algunas recomendaciones que puedes aplicar en el día a día con tus hijos, lamentablemente vivimos en un mundo donde la inocencia de los más pequeños de la casa es cada vez más vulnerada por personas sin escrúpulos y eso hace que las medidas de seguridad de refuercen de forma drástica para protegerlos.
Redacción TuSeguro.com